Un nuevo estudio ha encontrado que la exposición al aluminio, incluso en latas, puede causar daño cerebral a largo plazo
No guardes el aguacate así: es peligroso¿Cuántas veces bebemos de una lata o consumimos alimentos que han estado en contacto con aluminio? Pues bien, un nuevo estudio advierte de los riesgos de estos hábitos generalizados. De hecho, los expertos han relacionado la exposición al aluminio con un nuevo efecto secundario para el cerebro humano.
Se ha hablado varias veces del aluminio como una sustancia peligrosa para nuestra salud, ahora una nueva investigación confirma que este metal puede ser dañino para la salud a largo plazo, particularmente la del cerebro.
Los científicos británicos que realizaron el estudio, publicado en Journal of Alzheimer's Diseases, querían investigar cómo la exposición al aluminio puede afectar la predisposición genética de las personas a diversas formas de demencia, incluida la enfermedad de Alzheimer.
Investigaciones anteriores ya han planteado la hipótesis de que el aluminio presente en productos cotidianos, como los desodorantes, puede estar asociado de alguna manera con enfermedades neurodegenerativas y formas de demencia.
Por tanto, la nueva investigación se centró precisamente en este aspecto, examinando la presencia de aluminio en el cerebro de donantes con antecedentes familiares de Alzheimer.
El análisis demostró que las minúsculas trazas de aluminio que pueden entrar en nuestro organismo, por ejemplo cuando bebemos de una lata o si hemos envuelto un bocadillo con este material, pueden causar graves daños a nuestra función cognitiva a largo plazo.
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De hecho, los investigadores encontraron que el aluminio estaba presente en las mismas áreas del cerebro donde se encuentran los ovillos de proteínas Que aparecen en las primeras etapas del Alzheimer. El estudio también mostró cómo el propio aluminio podría desempeñar un papel en la formación de esos ovillos y placas que preceden a la aparición de la enfermedad de Alzheimer.
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Todo un descubrimiento impactante (aunque se confirmará con más investigaciones), considerando la exposición que todos tenemos a este material. Los investigadores también señalaron que una de las razones del efecto del aluminio sobre la demencia podría ser que, a medida que envejecemos, nuestros riñones se vuelven menos capaces de filtrar esta sustancia fuera del cuerpo, lo que podría conducir a una acumulación en el cerebro.
Limitar la exposición, por tanto, podría ser fundamental y, teniendo en cuenta cuántas bebidas se envasan en latas de aluminio, parece que sería mucho mejor (pero ya lo sabíamos) optar por el cristal.
Fuente: Diario de la enfermedad de Alzheimer
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