Una jirafa fue rescatada de la isla de Longicharo en Kenia gracias a una balsa improvisada hecha con plástico y metales.
Una jirafa fue rescatada de la isla de Longicharo en Kenia. Lamentablemente, las incesantes lluvias provocaron el desbordamiento del lago que rodea el islote, poniendo en peligro la vida de la fauna local.
El transporte, a cargo de la organización no gubernamental Save Giraffes Now, se realizó gracias a una balsa improvisada, hecha con metales y plástico.
El equipo de conservación trabajó con las autoridades de Kenia para trasladar las nueve jirafas que quedaron varadas en la isla. Asiwa fue el primero en ser transportado y rescatado en el santuario; el viaje tomó alrededor de una hora.
Para que la mudanza fuera menos traumática, los rescatistas colocaron vainas de acacia en la barcaza para que el animal pudiera comer algo y aliviar el estrés.
David O'Connor, presidente de la ONG Save Giraffes Now, dijo a Reuters que el tamaño de las jirafas dificultaba el rescate:
No es tan fácil mover estos gigantes. No saben que estás tratando de ayudarlos, piensan que eres un depredador.
Afortunadamente, a pesar de las dificultades, ¡la jirafa está a salvo!
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