Esta cocina solar representa, especialmente en zonas de extrema pobreza, una alternativa sostenible y económica para cocinar.
Está a punto de acabar atropellado, su madre lo salvaHecha con una vieja parábola, esta cocina solar representa, especialmente en zonas de extrema pobreza, una alternativa sustentable y más económica para cocinar.
Con la intención de ayudar a las personas en situación de pobreza, sin dejar de lado el impacto ambiental, Maximino Antonio Piedad, un mexicano de 71 años, inventó una cocina solar fabricada exclusivamente con materiales reciclados. Una idea económica y sostenible que hará posible que muchas familias con dificultades económicas utilicen energías renovables para la elaboración de alimentos.
Don Antonio vive en Ecatepec, uno de los municipios más pobres no solo de la región del Estado de México, sino de todo el país, caracterizado por altos índices de pobreza y pobreza extrema. Para muchas personas de estas zonas, que ni siquiera han encendido los servicios básicos, esta estufa representa una alternativa mucho más económica y sustentable ya que utiliza únicamente la energía limpia del sol, eliminando por completo los costos de electricidad, gas y uso de leña.
La cocina, construida con materiales comunes reciclados, utiliza una antigua parábola colocada en la parte inferior, a unos 50 centímetros de la parrilla, que refleja el sol generando el calor necesario para calentar los alimentos. Se puede utilizar para preparar distintos tipos de comida o, como dice Antonio, incluso para calentar el agua del café.
La idea le vino a la mente cuando observó a algunas personas tratando de construir una cocina alimentada por energía solar con una rueda y un espejo. Después de seis meses de pruebas continuas, logró perfeccionar esa idea y fabricar su propia estufa solar, vendiéndola a precios accesibles. El producto de la venta lo destina a autofinanciarse y ayudar a sus vecinos que atraviesan una difícil situación económica.
Don Antonio, oriundo de Amatitla Santiago, no tuvo la oportunidad de ir a la escuela, sin embargo, esto no se lo impidió. A los 20 años decidió aprender español de manera autodidacta y comenzó a viajar al Estado de México en busca de una mejor oportunidad de vida.
Luego de haber visto y apreciado esta cocina, alternativa y ecológica, concebida por el hombre de 71 años, los usuarios sociales, impresionados por su noble causa, viralizaron el video de la cocina solar, permitiéndole difundir su invento y recibir más apoyo de la gente. Gracias a la visibilidad que recibió, pudo vender su proyecto también en otras zonas de México, llegando incluso a Estados Unidos.
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