Finales de septiembre y principios de octubre es el momento adecuado para plantar bulbos de azafrán en nuestras macetas de terraza
Está a punto de acabar atropellado, su madre lo salvaFinales de septiembre y principios de octubre es el momento adecuado para plantar bulbos de azafrán en nuestras macetas de terraza
Sí, porque esta es la definición que se utiliza al hablar de esta maravillosa y preciosa planta: el Crocus sativus, de donde tomamos el azafrán.
Si tenemos la suerte de haber recibido unos bulbos de regalo o conocemos a algún cultivador de confianza al que comprárselos, aún estamos a tiempo de plantarla. El clima templado de esta temporada, que parece alargarse hasta principios de octubre en la mayor parte de la península, es perfecto para la siembra. Debemos saber que la única forma de reproducir esta planta es a través de sus bulbos. Ya que las flores son estériles, es decir, no producen semillas y por lo tanto frutos. En primavera, cuando se acaba el ciclo de vida del bulbo madre, comienza el nuevo. De hecho, en su interior hay varios cogollos, unos darán vida a flores y hojas, otros a bulbos que por corrección llamaremos cormos. (Azafrán: todos los usos y cómo comprarlo)
Sin pretender convertirnos en grandes productores de azafrán, si lo único que queremos es disfrutar de la extraordinaria belleza de esta planta, podemos probar suerte en esta sencilla operación.
Cómo enterrar los bulbos
Kazakova Maryia/Shutterstock
Si tenemos cormos con un tamaño medio de unos 2,5 cm, consigamos un balcón lo suficientemente grande como para poder espaciarlos 10 cm entre sí. Además, debemos tener cuidado de usar un buen suelo, rico en nutrientes pero suficientemente ligero y drenante, de lo contrario, la nueva planta corre el riesgo de tener demasiado esfuerzo para emerger del suelo.
El cormo tiene una parte inferior más plana, de la que surgirán las raíces mientras que la parte superior tiene unos manojos de hojas secas. Este es el lado que debe colocarse hacia arriba exactamente recto. Incluso una ligera inclinación someterá a la planta a un estrés excesivo en la fase de crecimiento para encontrar su camino hacia la luz. Será suficiente con hacer un agujero suficientemente grande a una profundidad de 6-8 cm, introducir el cormo y tapar sin apretar demasiado.
Las características de la planta de azafrán
Si se planta el jarrón con los bulbos/cormos en un lugar resguardado, ya en el mes de enero, febrero a más tardar, podríamos ver aparecer las primeras hojas. Estos tienen un color verde claro brillante y una forma lanceolada. Casi parecen largos tallos de hierba.
En muy poco tiempo, también podremos ver el botón floral. Este se presenta en un hermoso color lila que tiende al púrpura con estigmas rojos contrastantes en el interior. Una verdadera obra maestra de la naturaleza.
Los estigmas son la parte superior de los pistilos donde se concentra el preciado polvo y donde están contenidas las moléculas de Picrocrocina y Safranale que dan a la especia su aroma característico. Si bien es un carotenoide, la Crocina, que le da el típico color dorado, que desde hace milenios se ha utilizado para pigmentar telas y dar color a la vajilla.
Además, si queremos eliminar los estigmas de nuestras plantas, bastará con secarlas en un lugar fresco y seco antes de poder utilizarlas en la cocina.
Síguenos en Telegram | Instagram | Facebook | TikTok | YouTube
Sobre el azafrán también te puede interesar:
- Azafrán, el ingrediente más preciado del mundo: el espectáculo de la floración (FOTO)
- Colchicus de otoño, como reconocer el falso 'azafrán' tóxico
- Alzheimer: una posible cura a partir del azafrán
- Azafrán: 10 recetas para realzarlo más allá del risotto
- El oro rojo de Abruzzo
