Síndrome nefrótico en gatos: por qué debes saberlo, las causas y cómo tratarlo

Síndrome nefrótico en gatos: por qué debes saberlo, las causas y cómo tratarlo

Descubre todo lo que hay que saber sobre el síndrome nefrótico en felinos, una enfermedad rara pero extremadamente peligrosa

Los gatos, al igual que otras mascotas, suelen disimular muy bien el dolor y enmascarar teatralmente los síntomas de una enfermedad, al menos lo intentan en la gran mayoría de los casos. Por ello, puede ser difícil notar que nuestro amigo felino está enfermo y notar un estado de malestar repentino. Estas son algunas de las razones por las que se debe revisar periódicamente la salud del gato, realizándole todos los análisis necesarios.





De hecho, hay enfermedades que, si no se tratan a tiempo, pueden ser fatales. Uno de ellos es el síndrome nefrótico, un trastorno que se presenta junto con otras condiciones clínicas. Así que veamos qué es este síndrome, cuáles son sus causas y con qué terapias tratarlo.

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¿Qué es el síndrome nefrótico?

El síndrome nefrótico es una enfermedad que ocurre con cuatro alteraciones: proteinuria, hipoalbuminemia, hipercolesterolemia y edema periférico. Este síndrome es un trastorno de los glomérulos renales, los diminutos capilares arteriales que filtran la sangre, pero que debido a esta enfermedad se debilitan al volverse menos selectivos y expulsar una gran cantidad de proteínas a través de la orina. Unos 3.5 g de proteína perdida son suficientes para desencadenar una reacción en cadena.

La pérdida excesiva de proteínas provoca niveles bajos de albúmina en la sangre, una de las proteínas más importantes para cualquier organismo vivo, y esto a su vez puede provocar edema. Los altos niveles de grasa en la sangre y una mayor susceptibilidad del animal a las infecciones también están relacionados con este síndrome.

Causas del síndrome nefrótico en gatos

Las causas conocidas del síndrome nefrótico en gatos hasta el momento son:

  • Glomerulonefritis inmunomediadaa que es la alteración de los glomérulos renales. En los gatos esta enfermedad puede ser congénita porque la comparten otros miembros de la misma familia o ser contraída, pero esto ocurre muy raramente.
  • Amiloidosis, una grave enfermedad degenerativa que, debido a la acumulación de la proteína amiloide, compromete la funcionalidad de tejidos y órganos. La amiloidosis es una enfermedad típica de algunas razas como el Abisinio, el Siamés, el Somalí y el Oriental donde se presenta en diferentes tipos, pero generalmente se considera una complicación rara.

Síntomas del síndrome nefrótico en gatos

El síndrome nefrótico se manifiesta a través de una serie de condiciones que, si se observan de forma concomitante, podrían ser la manifestación de trastornos renales que deben investigarse en un primer momento. Algunas de estas condiciones están en los gatos:



  • ascitis, el vertido de fluidos en la cavidad abdominal del animal
  • dificultades respiratorias
  • pérdida de peso y tendencia a la anorexia
  • debilitamiento de la visión hasta la pérdida completa
  • micción más frecuente de lo habitual con posible sangre en la orina
  • letargo

Diagnóstico del síndrome nefrótico en gatos

Para diagnosticar el síndrome nefrótico, el veterinario realizará una serie de pruebas al gato que generalmente incluyen:

  • examen de sangre completado
  • análisis de orina y cultivo de orina
  • radiografía de pecho
  • ultrasonido abdominal
  • biopsia renal
  • control de la presión arterial

Tratamiento del síndrome nefrótico en gatos

Una vez realizadas todas las comprobaciones necesarias y realizado el diagnóstico, el veterinario te indicará si es necesario hospitalizar a tu gato para poder seguirlo mejor en la clínica o si es posible puedes darle un terapia domiciliaria. Todo depende de cuán débil sea la salud del gato y, a menudo, lo mejor que se puede hacer es combinar ambos.

Para el síndrome nefrótico no hay cura especifica, pero es claramente posible curar todos los trastornos relacionados. En primer lugar, deberá cambiar la dieta de su gato, siguiendo una dieta renal especifica bajo en sodio. Alimentos de este tipo son fáciles de encontrar, pero el propio veterinario sugerirá un tipo específico para las necesidades del felino. Si tienes otros gatos u otros animales en la casa, ten cuidado donde colocas sus comederos para evitar que otros se coman su comida. Además de cambiar la dieta, el veterinario puede prescribir una terapia de fluidos y el uso de antibióticos. Para el tratamiento de la ascitis, se debe considerar una intervención para eliminar los líquidos abdominales.



Desafortunadamente, no hay formas de prevenir el síndrome nefrótico, pero saber lo antes posible que su gato está afectado le permitirá evitar lo peor y tratar la enfermedad a tiempo y con precisión. Se deben seguir estrictamente todas las instrucciones que te dará el veterinario. para monitorear cómo responde el animal a las terapias y permitir que los médicos actúen lo antes posible en caso de que no haya mejoras. Si ocurre algún episodio extraño, recuerda anotar siempre la hora y la fecha en que ocurrió en algún lugar y contactar de inmediato a tu veterinario de confianza para ponerlo al día sobre el incidente.

Fuente: Petplace 

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