Una nueva investigación sugiere que las personas predispuestas a tener niveles altos de colesterol LDL tendrán automáticamente un mayor riesgo de tener obstrucciones o depósitos de calcio en la válvula aórtica.
No guardes el aguacate así: es peligroso
altos niveles de colesterol malo (ldl) son extremadamente peligrosos para nuestro organismo y con el tiempo pueden conducir al desarrollo de enfermedades cardiovasculares muy graves. Ahora, una nueva investigación relaciona el exceso de colesterol LDL con posible daño a la válvula aórtica con estenosis (obstrucción), un problema muy frecuente especialmente entre los ancianos.
El estudio, una revisión de varias investigaciones previas sobre un muestra de unas 35 mil personas, argumenta que aquellas personas predispuestas a tener niveles elevados de LDL tendrán automáticamente un mayor riesgo de padecer bloqueos o depósitos de calcio a nivel de esa válvula cardíaca que, situada entre el ventrículo izquierdo y la aorta, regula el flujo de sangre a los distintos órganos y tejidos de nuestro cuerpo.
Inicialmente la enfermedad es asintomática pero posteriormente sintomas se sienten claramente: dolor en el pecho, dificultad para respirar, posible pérdida de conciencia e insuficiencia cardíaca.
Una vez más el verdadero arma en nuestro poder evitar la posibilidad de encontrarnos en esta situación es el prevención. Reducir el colesterol LDL es más importante que nunca para evitar este y otros posibles riesgos para nuestro sistema cardiovascular, pero no debemos reducirlo en el último momento. De hecho, según los investigadores canadienses de la Universidad McGill que realizaron el estudio, los medicamentos para reducir el colesterol que se tomaron una vez que apareció la enfermedad ya no tendrían ningún efecto para detener el problema. Por lo tanto, es extremadamente importante actuar primero.
Si el problema es una acumulación de colesterol malo debido a una predisposición genética, además por supuesto de cuidar la nutrición al menos para no sobrecargar el cuerpo con colesterol adicional, a menudo es necesario someterse a terapias farmacológicas preventivas.
El estudio fue publicado en el Journal of the American Medical Association.
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