Cigarrillos electrónicos: boom, pero ¿qué tan seguros son?

    Cigarrillos electrónicos: boom, pero ¿qué tan seguros son?

    Cigarrillos electrónicos como alternativa al cigarrillo normal: cada vez más fumadores se acercan a ellos, en un intento de limitar los daños relacionados con la ingesta de nicotina. ¿Es realmente seguro usar cigarrillos electrónicos con la esperanza de limitar los riesgos para su salud o poder dejar de fumar por completo?



    No guardes el aguacate así: es peligroso


    Cigarrillos electrónicos como alternativa a los cigarrillos normales: cada vez más fumadores se acercan a ellos, en un intento de limitar los daños asociados a la ingesta de nicotina. Usar cigarrillos electrónicos, con la esperanza de limitar los riesgos para su salud o poder dejar de fumar por completo, ¿Es realmente seguro?

    En opinión del Sociedad Respiratoria Europea, no habría suficientes estudios disponibles hoy para probar la efectividad real de los cigarrillos electronicos y que pueden autorizar para recomendar el uso de los mismos con el fin de dejar de fumar cigarrillos.

    Los cigarrillos electrónicos en sí mismos no se considerarían completamente libres de riesgos para la salud, si en este momento uno empresa importadora de recargas para el mismo se encuentra sotto pulgadas tras la intervención de la NAS, que ordenó la incautación de unos cincuenta paquetes de recargas para cigarrillos electrónicos destinados a la venta en quioscos. No llevaban le en el empaque alegaciones relativas a los riesgos para la salud de los fumadores.

    Mismo Instituto Superior de Salud había hablado hace unas semanas recordando como cigarrillos electronicos no están exentos de riesgos para la salud, y deben ser considerados como verdaderos medicamentos que, como sabemos, además de los efectos curativos pueden tener efectos secundarios.

    Según el Instituto Nacional de Salud (ISS), los cigarrillos electrónicos presentarían la única ventaja de reducir el humo de segunda mano, ya que emiten vapor, pero no funcionan por combustión. Además, en opinión de la ISS, podrían representar un riesgo de iniciación al tabaquismo convencional basado en el tabaco y la adicción potencial. Un riesgo que se considera importante especialmente para los jóvenes, dada la fácil disponibilidad de cigarrillos electrónicos a través de Internet.


    Dirigiéndose al Ministerio de Salud, la ISS recordó que actualmente no existe evidencia científica suficiente para establecer la seguridad y eficacia de los cigarrillos electrónicos como método para dejar de fumar; a oarere de la ISS, ellos deberían ser regulados como dispositivos médicos o productos farmacéuticos y no como productos del tabaco. Los cigarrillos electrónicos, enfatizó la ISS, deben ser tratados como drogas y sujetos a los controles correspondientes. Esto sucederá pronto en los Estados Unidos, mientras en Francia Los cigarrillos electrónicos ya han sido aprobado para uso terapéutico.

    En otros Países del mundo Sin embargo, los cigarrillos electrónicos son prohibido: Noruega, Brasil, Turquía, China, Canadá, Uruguay y Tailandia han prohibido su uso, aunque en China se siguen produciendo para la exportación. Según datos comunicados por la ISS, fumar cigarrillos electrónicos, de 5 a 20 usos por día, llevaría a exceder los límites aceptables de consumo de nicotina por EFSA, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, y fijado en 0,0008 mg por kg de peso corporal.

    Un riesgo adicional para la salud había sido indicado con motivo de la conferencia de la Sociedad Respiratoria Europea celebrada el pasado mes de septiembre en Viena, donde se destacó cómo después de 10 minutos de bocanadas del cigarrillo de alta tecnología puede medirse la resistencia de las vías respiratorias al aire, la llamada broncocostriziona, que oscila entre 182 y 206%. Otros estudios no han pero daño resaltado para el corazón o los pulmones vinculados a los cigarrillos electrónicos, mientras que la Universidad de Catania ha evaluado positivamente el uso de cigarrillos electrónicos, lo que podría ayudar a los fumadores empedernidos a reducir considerablemente el numero de cigarrillos fumar o abandonarlos por completo.


    Dadas las numerosas incertidumbres en este momento, sentimos que recomendar precaución sobre el uso de cigarrillos electrónicos, en espera de evidencia científica irrefutable. Los cigarrillos electrónicos, inventados en 2003, probablemente realmente hayan ayudado a algunos fumadores a dejar los cigarrillos comunes, mientras que otros, mientras tanto, habrán dejado de fumar simplemente por su fuerza de voluntad oa otros técnicas consideradas inofensivas (hipnosis, entrenamiento autógeno, apoyo psicológico, lectura de libros especiales, etc.). Dejar de fumar solo puede ser bueno para su salud. Cada uno elige, si lo desea, el método que le parezca más adecuado.

    marta albe

    Añade un comentario de Cigarrillos electrónicos: boom, pero ¿qué tan seguros son?
    ¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.